Iván Cepeda se impuso con clara ventaja en la consulta del Pacto Histórico y se perfila como candidato único de la coalición para la Presidencia, al reunir más de 664.000 votos, equivalentes al 63,7% del escrutinio cuando ya se habían contabilizado más del 60% de las mesas. Con este resultado, el senador asumirá la bandera del movimiento ligado al presidente Gustavo Petro, pero su victoria desató de inmediato un conflicto jurídico: La pregunta sobre si este triunfo le permite competir también en la consulta del Frente Amplio, programada para marzo de 2026, ha dividido a dirigentes y analistas de la coalición.
Cepeda lleva en la contienda una larga trayectoria pública. En el Congreso presidió debates centrados en las víctimas y la justicia transicional, protagonizó la defensa del Acuerdo de Paz y participó en los diálogos de La Habana con las FARC. Su perfil en el Polo Democrático Alternativo y en la Comisión de Paz lo convirtió en una pieza conocida del debate político nacional.
La nominación de Cepeda supone para el Pacto Histórico la búsqueda de continuidad del proyecto político de Petro, aunque la controversia sobre la validez del proceso electoral mantiene abiertas tensiones internas que la dirección deberá resolver. Mientras los equipos discuten cuestiones legales y estratégicas sobre una posible doble consulta, la campaña del senador afronta el reto de consolidar apoyos dentro del movimiento y enfrentar la disputa judicial que podría definir sus opciones a seguir, o no, en la carrera presidencial.









