La investigación a Lucho Herrera por la presunta desaparición de cuatro vecinos de su finca

Lucho Herrera, campeón de la Vuelta a España de 1987 y una de las grandes leyendas del ciclismo colombiano, está siendo investigado por participar en un caso de desaparición forzada y asesinato de cuatro campesinos en el año 2002. En concreto, se intenta averiguar si Herrera contrató a dos sicarios para eliminar a esos campesinos con los que mantenía una disputa por unas tierras.

La jueza María del Pilar Bocarejo, del Juzgado Cuarto Penal de Fusagasugá, es la que ha abierto el caso tras tomar testimonio a los presuntos sicarios, dos exparamilitares que apuntaron directamente a Herrera.

Según ha trascendido, los hechos ocurrieron en 2002 en la región del Sumapaz, durante una etapa especialmente violenta del conflicto armado colombiano. Las víctimas eran cuatro campesinos vecinos de Herrera, e identidicados como Víctor Manuel Rodríguez Martínez, José del Carmen Rodríguez Martínez, Gonzalo Guerrero Jiménez y Diuviseldo Torres Vega. En su declaración ante la juez, uLis Fernando Gómez Flórez, alias ‘Ojitos’; y Óscar Andrés Huertas, alias ‘Menudencias’, afirmaron que Herrera los contrató a través del grupo Autodefensas Campesinas del Casanare. Les dio fotos de las víctimas y una suma de 40 millones de pesos colombianos (unos 14.800 euros de la época) para compar armas y útiles con los que matar y hacer desaparecer a las víctimas.

La motivación, según ellos, era apropiarse de las tierras colindantes a su finca, usando como excusa que los campesinos eran supuestos milicianos de las FARC.